T"Nto tengo muchas respuestas, en general, menos aún en particular, y es difícil poder decir alguna cosa cierta en esta vida, absolutamente cierta, pues es probable que después, más temprano que tarde o más tarde que temprano, una ola de agua salada se la lleve por delante y el horizonte se pregunte con nosotros de dónde y por dónde llegó. De cualquier forma (después de recibir tus palabras, que ya sé que no buscan respuesta ni formulan pregunta) pienso que hay algunas pequeñas cosas importantes: amor, cariño, respeto, admiración y honestidad (ojo, no confundir con sinceridad, que está sobrevalorada). Con esas cinco semillas quizá sea posible poseer y construir un jardín, disponer de un espacio común y compartido de intercambios, aprecios y mutuos reconocimientos (entendiendo por reconocimientos la capacidad de captar, percibir, valorar, expresar y sentir en el otro lo que no sabemos, lo que desconocemos). Sería casi propicio, siguiendo el tono del texto, manifestar ahora las inmensas posibilidades que ello provoca, las oportunidades que se abren ante nosotros... pero estimada, el amor, el cariño, el respeto, la admiración y la honestidad, me impiden caer en ese descenso a los éxtasis de la vida. Pues nada ni nadie nos asegura, ni aún nos han demostrado, que con ellos todo sea sencillo, y los días amanezcan con soles y terminen con lunas llenas. Cierto es. Y tampoco, no queden dudas al respecto, por supuesto, estoy seguro que sea capaz de mantenerlos constantes (cuántos desaciertos reales) y no sólo de pensamiento sino sobre todo de acción. Sí, como ves, no he conseguido avanzar mucho, poseo más incertidumbres que ese antes lejano, cuando caminábamos de la mano por la playa de una ciudad sin playa. Estas son mis únicas cartas, sin ases en la manga, y estaría encantado en que quisieras sentarte a jugar interminablemente esta partida...".

El pasado 7 de agosto, en el Cabo de San Vicente, me encontré esta nota escrita a lo largo de toda una pared, ustedes pueden creerme o no, pues el cine norteamericano, con destacadas excepciones, ha hecho mucho mal.