"Si no hubiera Dios pisotearíamos a todo Dios", decía en 1994 en la que fue su última entrevista antes de abandonar el colegio San Antonio, centro escolar que marcó la vida y trayectoria de Pacífico Martínez Ugidos (Laguna de Negrillos, León, 10-3-1933). El sábado, Pachi , como así se le conoce familiarmente al franciscano, recibió en Descargamaría el homenaje de varias generaciones de cacereños, con motivo del 25 aniversario de la obra campamental que promovió al norte de la serranía cacereña.

Y qué mejor reconocimiento que darle el nombre de Padre Pacífico a este campamento, ubicado en un lugar privilegiado y convertido en escuela formativa de tantos estudiantes.

Pachi nació en el seno de una familia de labradores. A los 13 años ingresó en el colegio seráfico de misiones de Fuente del Maestre y desde su época estudiantil despuntó por su carácter revolucionario. Rompió puertas, esquemas y siempre se ha sentido libre y querido.

Quizás ese espíritu le llevó a un convento de Sevilla donde reside y en el que no olvida aquellos tiempos del San Antonio, en los que impartió clases al mismísimo Pedro Almodóvar y supo convertirse en el referente indiscutible de cientos de cacereños que el sábado, justamente, volvieron a homenajearle.

MIGUEL ANGEL MUÑOZ