TLta campaña electoral avanza y se suceden noticias que muestran la catadura moral de algunos. Sabemos de un recomendado de Rato que gusta de gastar nuestros dineros por tierras de Teófila, o la honradez de una pareja desvela que en el Partido Popular olvidan sobres con muchos miles de euros, el valor de un euro para Trillo, o ignoramos a qué muertos se refiere Aznar cuando reclama la paz para ellos, porque los familiares de los militares fallecidos en el accidente aéreo no saben a quién han enterrado.

Tal vez el pasotismo de la juventud ante algo tan importante como son unas elecciones pueda justificarse en la conducta de parte de la clase política. Por eso debieran encauzar sus protestas hacia las urnas. El poder está en el número de votos y no en los apellidos o en las fortunas. Es importante votar para exigir. Una juventud que es capaz de crear espectáculos como Kon-trastes o los vídeos presentados al certamen Envídeo, puede, si quiere, cambiar la realidad.

Por lo demás, desde la presunción de inocencia, creo en la no culpabilidad de mi alcalde, a pesar del patético comportamiento de su jefe de gabinete. El paso por el juzgado es una parada en la vida municipal. Ojalá no lleve añadida fonda para nadie.

*Maestro