Cometer errores, confundirse e incluso fracasar en la consecución de objetivos concretos es una constante en cualquier actividad y, por tanto, también es una constante en la actividad política. Los errores no son inútiles si sirven para encontrar el camino de los aciertos y, en este sentido, la larga trayectoria de errores y fracasos de la Junta para atajar el problema del paro, ya deberían habernos situado en la dirección acertada, porque lo peor no es el fracaso en la gestión, sino el empecinamiento en el fracaso, el mantenella y no enmendalla y la incapacidad para rectificar, insistiendo en aplicar unas políticas que durante veinticinco años nos han abocado al más estrepitoso de los fracasos. A mí me gustaría ser condescendiente con la Junta e incluso poder solidarizarme con sus esfuerzos a la hora de resolver el problema del paro, pero es imposible hacerlo porque la Junta, pese a la evidencia incontestable del resultado final, y pese a la tozudez de los datos, sigue erre que erre , apostando por la misma medicina y sosteniendo al administrador de la misma.

¿Por qué parece el paro un mal endémico de Extremadura, si en otras comunidades que andaban igual e incluso peor que nosotros, han logrado erradicarlo en unos casos y mitigarlo en la mayoría? Pese a que el consejero responsable se ha revelado en ocasiones como un adicto al plagio, un copión compulsivo capaz de fusilar textos ajenos (denúncienme, por favor), demuestra que incluso esto lo hace mal, porque no es capaz de aprovechar la experiencia de los demás y anda enrocado en la administración de unas recetas absolutamente inútiles. Aunque grite mucho, que eso sí lo hace bien, en Extremadura hay 75.255 parados, 865 más que en el mes anterior. Los últimos datos del INEM reflejan una subida del paro en Extremadura del 1,16%, mientras que en España baja un 0,88%. Es verdad que hay meses en los que el paro ha bajado, pero finalmente las cifras permanecen tan inalterables como las políticas que se aplican para atajarlo. ¿Un dato que ratifica la foto fija de nuestro fracaso? En Extremadura, a finales del 2003 estábamos mejor que a finales del 2005, o sea, lo de la medalla del amor: hoy más paro que ayer, pero menos que mañana.

XPESE Ax la cohetería oficial, el paro afecta esencialmente a la mujer y a los jóvenes. 51.586 paradas y 10.845 jóvenes menores de 25 años, que concluirán por irse de Extremadura, siguiendo la senda de los 7.000 que cada año buscan fuera el trabajo que aquí se les niega. Y si a estos datos añadimos la temporalidad y la precariedad laboral, el problema se hace más significativo, porque en esto también tenemos el índice más alto de España. Oro en el paro y oro en la precariedad laboral. El paro femenino en Extremadura a finales del 2005, era del 20,25% frente a la media española del 11,61%.

Cuatro planes de empleo concluidos, el quinto ejecutado a más del 50% y con un Plan Especial de Empleo en marcha, han servido para ratificar el fracaso de una política clientelar, más preocupada por el vocerío mediático y la propaganda que por resolver el problema más acuciante que tenemos en Extremadura: el paro. Por eso decía al principio que peor que el fracaso es insistir en el mismo, como si no hubiera solución alguna y la resignación fuera el único asidero posible. Después de 25 años de aplicar la fórmula magistral del vocerío, haciendo del paro el eje fundamental de las políticas socialistas, se constata de forma incontestable que el paro no para y que donde otros empiezan a ver soluciones, en Extremadura seguimos anclados en el fracaso. Durante el mandato de Felipe González , ya se presentó como inevitable el déficit y la ruina de la Seguridad Social, pero algo que parecía no tener soluciones se resolvió en sólo cuatro años, con José María Aznar .

Las políticas de empleo que no funcionan deben cambiarse y cuando la oposición oferta soluciones alternativas que se han mostrado eficaces en otras comunidades, es pura soberbia insistir en lo malo y despreciar lo positivo, porque finalmente el problema del paro es algo que nos afecta a todos.

*Presidente del Partido Popularde Extremadura