Octubre dejó 152 parados cada día en Extremadura, una tragedia que nadie es capaz de frenar. En la región hay casi 132.600 desempleados registrados en las listas del Sexpe, en una población de 700.000 habitantes en edad de trabajar (de entre 18 a 65 años). Además, la mayoría de quienes encuentran trabajo, lo pierden en un mes; un dato que se repite desde hace años y por el que los sindicatos denuncian fraude en la contratación, algo que los empresarios niegan. Fraude hay. Quienes vivimos sobre todo en los pueblos sabemos que en esas listas del Sexpe están todos los que son, pero no son todos los que están.

No todos los que sellan el cartón del paro, están realmente parados. Pero, ¿quién lo ataja para que las prestaciones lleguen a quienes las necesitan de verdad? Nadie. Porque esos parados dan y quitan votos. A finales de mayo, alguien me dijo: "Monago ha perdido las elecciones por mandar a los inspectores al campo, ¿cómo se le ocurre?; eso no se le puede hacer a los jornaleros". Pues eso.