THtay un precepto constitucional que cada vez que se pone en práctica levanta críticas: la Carta Magna establece que el funcionamiento de los partidos debe ser democrático y que debe existir la posibilidad de presentar candidaturas alternativas en los congresos, pero cada vez que en un partido ocurre esto aparecen los que dicen que estamos ante una jaula de grillos . No es comprensible que mientras que en formaciones políticas de izquierda minoritaria hay tres o cuatro corrientes, existan partidos que pretendan abarcar el amplísimo espectro del centro-derecha con una sola voz.

En el PP madrileño el ala derecha ha aplastado a los centristas, pero en Extremadura llevamos ya un mes de disputas y todavía no sabemos si Floriano es más centrista que Baselga o viceversa. Sería lamentable que todo este proceso se acabara en una pugna por controlar el aparato del partido porque harían un flaco favor a quienes seguimos manteniendo que la pluralidad en las organizaciones es síntoma de salud y los congresos a la búlgara la prueba fehaciente de la carencia de ideas.

*Profesor y activista de los derechos humanos