El pasado día 7 de julio estábamos jugando una de las típicas pachangas que se juegan todos los días en la Ciudad Deportiva cuando un chico resbaló, cayó al suelo, y... esguince de rodilla. Es normal que ocurran estas cosas en la Ciudad Deportiva de Plasencia, ya que el estado de las pistas de baloncesto es más que lamentable. Es una auténtica vergüenza que unas instalaciones así estén en este estado, y lo único que hace falta es una mano de pintura, que lleva más de 5 años sin pintarse las pistas, mientras este ayuntamiento, que bien que se gasta el dinero en mejorar cada año más las pistas de pádel y de tenis, que cada vez hay más pistas de éstas. De hecho han quitado una de las pistas de baloncesto y han hecho otra de tenis. FERNANDO CLEMENTE RAMOS Plasencia