Que un partido alabe a otro de distinto signo político es un hecho atípico. Pero ha ocurrido. El presidente del comité local de Extremadura Unida, José Luis Poderoso , ha propuesto que el nuevo parque de Las Albercas lleve el nombre del actual alcalde, el popular Mariano Gallego . Según el proponente, el mandatario calabazón atesora una "entrega y un buen hacer que es justo reconocer". No sabemos si después del 11-M la solidaridad y el ser más humanos ha impregnado a nuestra clase política, pero ciertamente es éste un claro exponente de que algo está cambiando en algunos lugares. Seguro que el bueno de Mariano Gallego , ingresado en un hospital madrileño por una dolencia cardiaca, agradecerá la propuesta.

Pero no todos los políticos parecen estar por la labor de sumar en lugar de poner piedras en el camino de su oponente. El presidente del PP extremeño, Carlos Floriano , se ha apresurado a criticar al futuro Gobierno sin que éste haya tomado posesión. El mandatario popular no sólo no ha esperado los cien días de cortesía que se le da a quien accede al poder, sino que se atreve a decir lo que hará en el país (y lo que no hará en Extremadura) antes incluso de haber abierto la boca Zapatero .