TLtos dos partidos de derecha se han derrumbado en Portugal y las tres fuerzas de izquierda han incrementado las suyas hasta conseguir que José Sócrates y su partido socialista logren la mayoría absoluta. Los despropósitos del gobierno de Santana Lopes hicieron caer la moral de un pueblo castigado por males endémicos a los que hay que añadir el desempleo, las carencias en el sistema educativo y sanitario, o una administración burocratizada.

De Sócrates sabemos que representa al ala más derechista del PS y que ha sabido atraer al voto conservador para no hacerle depender de los comunistas tradicionales o de las izquierdas alternativas del Bloco de Esquerda. Quienes amamos Portugal deseamos mucha suerte para este político tocado por la fortuna: En su mano está no caer en los errores de su padrino, el ex primer ministro António Guterres, que acabó por hacer una política simplemente de derechas. Cuando la izquierda juega a ser conservadora acaba entregando fácilmente el poder a la derecha porque los votantes se dan cuenta de que esas tareas hay que dejarlas a los profesionales. Nunca la izquierda lusa tuvo tanta fuerza y sería una pena que todo quedara en fuegos de artificio de un gran orador.

*Profesor y activistade los Derechos Humanos