Leo en el Periódico Extremadura el pasado día 7, que el Consejo de Comercio de Extremadura decidía hace unos meses no incluir en el calendario de festivos el 7 de enero, día en que vienen comenzando las rebajas. Razón por lo que se consideró este día, como un domingo convencional, en el que sólo podrían abrir establecimientos de menos de 300 metros cuadrados (y no franquicias) queriendo favorecer de esta forma al pequeño comercio. Y cuál es mi sorpresa ante las manifestaciones del señor Rojo, presidente de la Asociación de Empresarios del Comercio de Cáceres, cuando afirmaba que: "la mayor parte de establecimientos, casi un 90%, permanecerán cerrados" porque "los consumidores están mentalizados de salir a comprar cuando saben que todo está abierto, y además son conscientes de que todavía le quedan muchos días". No alcanzo a comprender que, como empresarios que son, desaprovechen esta ventaja que se les brinda el primer día de rebajas...

Pues se equivocó señor Rojo, en Cáceres, la gente sí salió de rebajas . Sólo hay que echar un vistazo a la prensa donde nos muestra fotografías de una de las pocas tiendas que abrieron abarratoda de compradores. La gente sí sale... ¡si abren las tiendas, claro!, de hecho, muchos cacereños resignados por la falta de oferta, se van de compras a Badajoz, donde saben que abrirán con seguridad.

En Badajoz el pequeño comercio tiene una gran mentalidad. No hay más que darse una vuelta por la calle Menacho, donde la mayoría de las tiendas no cierran a mediodía, y permanecen abiertas, casi todas, hasta pasadas las 21.00 horas. Aprendan de ellos, señor Rojo, dejen de ser tan comodones y déjense de criticar tanto a las grandes superficies y las franquicias, que son, por otra parte, los únicos establecimientos que les quedan a personas que tienen un amplio horario laboral, y centren sus energías en hacer de la calle Pintores, una calle Menacho, haga como el señor Doncel, aproveche "todas las oportunidades" y contribuya para que nuestra calle Pintores sea una calle viva que le dé vida a nuestra preciosa ciudad, y ya verá como se llenan esas pequeñas tiendas...

Victoria Caro **

Cáceres