TEtl personal se pregunta: ¿qué tiene Belén Esteban que está hasta en la sopa? ¿Cómo es posible que una mujer ignorante, maleducada, lleve diez años en televisión ganando cantidades astronómicas?

La gente necesita iconos a quienes adorar y lo han encontrado con esta señora, protagonista de la prensa rosa. Belén Esteban puede ser un icono de la banalidad, pero vende. Tiene su blog, página web, es la musa de Tele 5. Se proyectan documentales sobre ella, da las doce campanadas y protagoniza tesis y programas especiales.

Hace unos días se ha presentado en Cáceres la Expo Party. Esta exposición está basada este año en la figura de Belén Esteban, plasmada por más de cuarenta artistas que la han elegido icono de dicho Festival de Pop Art, no porque sea ejemplo de nada sino porque es un personaje mediático, pese a quien pese, y que proporciona publicidad al festival.

Quizá la clave está en que, mientras la Esteban viene de frente, es transparente, pero sin falsedad, muchos (políticos, religiosos, escritores y periodistas) son falsos, hipócritas, lascivos y machistas que se dejan ver en cuanto creen que un micrófono está cerrado o que sus declaraciones no van a salir a la luz pública. Hay demasiada basura en muchos de los que se creen portadores de los valores tradicionales: patria, familia, honradez, decencia, etc., y que resulta ser sólo de boquilla, porque detrás de la cámara son partidarios del divorcio, adulterio, aborto, acoso, malos tratos...

Quizá por eso triunfa la Esteban, porque no finge lo que no es, no presume de nada ni pretende dar lecciones de moral. Muchos intelectuales deberían tomar nota. Es cercana y espontánea, sencilla, honrada, desprendida, auténtica y que infunde lástima, quizá por su pasado triste de mujer abandonada, pareja de un famoso torero, y que, cual una Cenicienta moderna, fue expulsada de la mansión de Ambiciones y se vio en la calle con su bebé, pero en la vida real. En cualquier caso, es víctima de los caprichos del público y del oportunismo de una cadena de televisión que ve en ella --de momento-- la gallina de los huevos de oro.