WEw l AVE y sus plazos no deja de copar la actualidad extremeña. La importancia de esta obra ha hecho que, sobre la realidad de la misma, responsables del Gobierno central hayan elaborado una realidad virtual cuya columna vertebral es la especie de que estará terminada en el 2010. Los hechos --y precisamente los que caen en la esfera del propio Gobierno-- son tozudos y, año a año, los presupuestos, que son la máxima expresión del compromiso con la realidad, proponen unos plazos alejados de la fecha del 2010 (los de este año colocaban el horizonte de la obra en el 2011; los del próximo en el 2012...). Pero cuanto más claro se indica más énfasis emplea el Gobierno en hacer manifestaciones que pretenden corregir lo que aprueba. La última en hacerlo ha sido Magdalena Alvarez, titular del Ministerio de Fomento, quien en declaraciones dignas de mejor causa ha insistido en que el AVE extremeño "es una prioridad" para su departamento. ¿Cómo cabe interpretar esas palabras,si cada año el AVE se retrasa? ¿Cómo cabe interpretarlas si hasta esta semana no se hará la primera reunión para decidir la ubicación de las estaciones, un asunto tan complejo? Nadie cree que la conexión entre Madrid y Badajoz por AVE esté lista para el 2010 porque la programación de la propia obra no permite ese ritmo. Ya lo han puesto de manifiesto, de facto, quienes tienen la responsabilidad de distribuir el gasto. Y también han puesto de manifiesto que, por encima de la realidad virtual de las declaraciones referidas a "prioridades" está la realidad de los presupuestos. ¿A qué, entonces, tanta insistencia como si los extremeños creyeran ante las declaraciones de los políticos que lo que ven?
