TEtl muy probable o presunto asesino de Pagazaurtundúa viene mereciendo en estos días de agosto los principales titulares de prensa e informaciones preferentes en radios y televisiones. En particular, y por lo desacostumbrado, llama la atención el hecho de que fuera descubierta la personalidad de Aguirresarobe por razón de su ADN dejada en la taza del café, en una muestra genética que el etarra dejó en el bar minutos antes de haber ejecutado el crimen. Siete años más tarde, aquella prueba de ADN se comparó con un control de alcoholemia al que fue sometido el propio Aguirresarobe... Y ya tenemos nombre y condición del asesino etarra.

De este modo, la Ertzaintza, con los procedimientos más modernos, lograba resolver uno de los crímenes de ETA que más impacto causó en la sociedad vasca y que llevaba impune desde 2003. El ADN de la taza del café, y el ADN de un control de alcoholemia permitieron, finalmente, que agentes de la Policía autonómica detuvieron a las cuatro de la madrugada en Hernani, Guipúzcoa, al integrante del complejo Donosti de ETA Gurutz Agirresarobe Pagola , como el presunto asesino del jefe de la Policía Municipal de Andoain, militante socialista, y miembro de la plataforma Basta Ya , Joseba Pagazaurtundua .

Se ha sabido, además, que Agirresarobe vivía en el pueblo de al lado de Andoain, Hernani, y allí había permanecido todos estos años, haciendo vida normal, dejándose ver como activista de la izquierda abertzale y trabajando en una empresa de extintores. Apenas tuvo que recorrer siete kilómetros desde Hernani hasta Andoain para consumar el atentado. Desde entonces formaba parte de un comando durmiente que estaba a la espera de recibir nuevas órdenes para matar. También esperaba un hijo de su nueva compañera sentimental.

Al mismo tiempo que el presunto asesino, fue arrestada, en otro domicilio, Aitziber Ezkerra Segurajauregi , su novia en 2003, por proporcionar cobertura al asesino material y actuar como transporte de otros terroristas del comando como Ibon Fernández Iradi Susper . Ambos seguían en contacto a través de una tercera persona. Toda esta doble operación, dirigida por el titular del Juzgado Central de Instrucción número tres de la Audiencia Nacional, Fernando Grande Marlaska , es la segunda contra la banda terrorista que desencadena la nueva División Antiterrorista de la policía autónoma v asca, o Ertzaintza, reorganizada por el consejero de Interior del Gobierno vasco, Rodolfo Ares .

El pasado enero, apenas seis meses después de la llegada de Patxi López al Gobierno vasco, sus integrantes detuvieron a nueve terroristas en Vizcaya y Guipúzcoa relacionados con la colocación de coches bomba en Avila y Ondarroa, Guipúzcoa. ETA ha perdido, sólo este año, 68 militantes en España, Francia, Portugal, Italia, Inglaterra, Irlanda del Norte y Venezuela. "Este es un mal año para ETA y bueno para la libertad", aseguró Ares en el centro policial de Erandio, especialmente satisfecho por las detenciones. El Ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba , confirmó que la estrategia compartida entre las Fuerzas de Seguridad del Estado y la Policía Autónoma Vasca "no es otra que detener, detener y detener hasta que esto acabe". "Los terroristas y sus aprendices no pueden sentirse a salvo porque no vamos a cejar en su persecución", recordó ayer Ares en nombre de todas las víctimas

Volviendo al lugar del crimen: El asesino de Pagazaurtundua dejó su ADN en una taza de café el día 8 de febrero de 2003. Pagazaurtundua ya estaba en el bar Daytona, leyendo los periódicos, cuando Agirresarobe entró al establecimiento. Pidió una consumición mientras hacía tiempo a que se despejara la zona. Poco después, le disparó cuatro veces. Tres de las balas impactaron en el sargento, provocando su muerte. El escenario del crimen fue analizado por la policía científica, y varios testigos proporcionaron la descripción del etarra, que actuó a cara descubierta.

Pero aquel ADN de la taza, que se ha ido cruzando a lo largo de estos siete años con los de todos los detenidos relacionados con delitos de terrorismo y violencia callejera, en España y Francia, no había casado hasta hace pocos meses. Aunque fuentes policiales apuntaron a que en los últimos meses de seguimientos ha habido múltiples ocasiones de obtener restos orgánicos de Agirresarobe, "ya que hacía vida normal, iba a los bares...", se optó por instalar un control de alcoholemia. Si la revisión de todas las descripciones aportadas por testigos en 2003 lograron reavivar el caso, los restos de saliva de la boquilla del control le señalaron como la misma persona que apretó el gatillo en el Bar Daytona. Algunas fuentes no confirmaron ayer este extremo. El propio Ares fue prudente: "Todos los indicios llevan a Agirresarobe", dijo en público. El departamento no tiene ninguna duda.

Cuando los agentes fueron a detenerle, en el balcón de su casa ondeaba una bandera de apoyo a los presos de ETA. La Ertzaintza, que se incautó de numeroso material informático en las dos viviendas, y en alguna lonja vinculada a su actividad social, estudia ahora la participación del presunto asesino de Pagazaurtundua en el asesinato en 2001 del presidente del PP de Aragón, Manuel Giménez Abad , a quien mataron con la misma pistola.