Ayer se enfadó muchísimo el ministro de Defensa Federico Trillo y no sé por qué se enfada: durante la sesión de control del Gobierno le preguntaron por el destino de los 1.500 soldados españoles que están en la zona y que se convierten en fuerza ocupante", dijo Iñaki Gabilondo (SER) al final de su tertulia. Completó la frase enseguida Javier Pérez-Royo: "Y con el agravante para nosotros de que en este caso no hay ningún consenso entre la población española de que los soldados españoles deban estar ahí, a diferencia de la opinión norteamericana, que apoya la presencia de sus soldados en Irak. Estábamos orgullosos de ver a nuestros soldados en Bosnia y en Kosovo, pero ahora no de verlos en Oriente Próximo". Añadió en tono de broma Gabilondo: "Sólo le pedían a Aznar que no riña a quienes preguntan por esa decisión", y Nicolás Sartorius avisó de que "llevamos seis meses así. Da igual que preguntes sobre la guerra, qué hacen nuestros soldados ahí, quién hundió el Prestige o por qué tomó esa decisión".
Gabilondo insistía en advertir que ya hay diplomáticos españoles que se suman al gobierno de ocupación anglonorteamericana de Irak, y que "Trillo sigue diciendo que quién es usted para preguntarme esto". Y al vuelo del comentario, Alberto Oliart dijo: "Eso nos convierte en un objetivo claro de los terroristas de Al Qaeda. España debe buscar en la ONU una posición que ayude a cambiar la mentalidad de los norteamericanos y acepten que los shiís puedan ejercer su ley, salvo sus aspectos más brutales, y que fueran en concordancia con Irán".
