Periodista

NACIONALISMOS. Ningún demócrata de los que permanentemente quieren salvarnos de los peligrosos nacionalismos, ha hecho coro a las declaraciones de Rodríguez Ibarra sobre la presencia de estos partidos en los máximos órganos de representación pública del Estado. Hay mucho vendedor de demagogias y más hipócritas sueltos por los corrillos políticos, de los que merece este país.

LIBERTAD DE EXPRESION. Cuando ocurren estas cosas y en orden a la libertad de expresión sale el batallón de notables, muchos nacionalistas, llegando al insulto personal de quien libremente expresa ideas contrarias a las suyas o sus intereses, vemos la enorme diferencia con que cada uno interpreta este derecho consagrado por nuestra Constitución. El debate interno de un partido político ha quedado violentado.

LA RECTIFICACION. Quienes vimos la cara de Rodríguez Ibarra retirando su propuesta de establecer un mínimo del 5% de los votos del censo nacional para poder obtener acta de diputado en el Congreso, a cualquier fuerza política, observamos la tristeza del líder que cree en su organización y en el papel que representa a nivel nacional y la amargura del político que ve frenada la pureza del mensaje y las ideas, ante los aparatos electorales y las ansias de quienes lo aceptan todo con tal de tener la oportunidad de tocar poder, sin importarles los temas esenciales del país y el propio futuro de éste.

´LA VOZ´. Así se conoció en otro tiempo al inmortal Sinatra. Juan Carlos es ahora la voz del inconformismo dispuesta a denunciar, con nombres y apellidos, a tanto mercenario protagonista de la hipocresía y la mentira nacional.