Queridos Reyes Magos: este año no quiero nada para mí porque mi papá hace un año que no sale de casa. Me ha contado que ahora no trabaja. Yo creo que es por eso por lo que ya no me cuenta cuentos antes de dormirme y se pasa el día mirando por la ventana. Por las noches se sienta delante de la tele pero ya no se ríe y está siempre triste. Ayer mi mamá tampoco me abrazó cuando llegó a casa después de trabajar. Yo le pregunté que si le pasaba algo y me contesto que su jefe era muy malo y que le había dicho que no volviera. Por la noche me acompañó a la cama y cuando al salir cerró la puerta oí que empezó a llorar. Por la mañana le pregunté que qué le pasaba, que por qué estaba tan triste y no me contestó. Se limitó a cogerme de la mano, me la acarició y volvió a llorar. Yo no entiendo lo que está pasando, pero yo, queridos Reyes Magos, este año no quiero juguetes; lo que quiero este año es que todo vuelva a ser como antes, que mi papá me llame por las mañanas y me diga: "venga, cariño, corre que llego tarde al trabajo y te tengo que llevar al cole"; que por las noches me cuente un cuento y me dé un beso como hacía antes y que no esté triste. Y quiero que mi mamá vuelva por las tardes del trabajo y me dé un abrazo y juegue conmigo al escondite. Y que se ría, que esté contenta como estaba antes.

Yo sé que vosotros siempre habéis sido buenos conmigo. Ahora, por fa, quiero que seáis buenos con mis papás, no quiero juguetes, solo quiero que todo sea como antes.

Un beso muy grande para los tres.

Javier Puerto Rodríguez **

Acebo (Cáceres)