Pau Gasol dijo una vez --para justificar su decisión de no ir al último Eurobasket-- que en la NBA a veces es necesario "dar un paso hacia atrás, para luego dar dos adelante". El jugador extremeño de Toronto Raptors, José Manuel Calderón, ha debido pensar lo mismo cuando ha comunicado que no estará en la cita europea de Polonia, en septiembre. Y es que cuando Gasol aludía a esos "dos pasos" al frente se refería a los Juegos Olímpicos y al Mundobasket, las únicas competiciones en las que no faltan las estrellas del baloncesto internacional, entre las cuales están sin duda el pívot de San Boi y el base de Villanueva de la Serena.

Calderón nunca ha sido sospechoso dentro ni fuera de la cancha, y por eso hay que respetarle la presunción de inocencia cuando alude a la recuperación de sus lesiones en un dedo y una pierna para justificar la renuncia a la selección. Pero la pregunta es ¿se permitirían los Raptors prescindir de Calderón si, por ejemplo, se jugarán unos play off en septiembre? Difícilmente. Así es la NBA.

Nuevamente, el campeonato de Europa vuelve a ser considerado una competición de segunda por la élite. Al menos, la baja de Calderón será una garantía para disfrutar de su juego en el Mundobasket de Turquía y los Juegos de Londres... Con el permiso de Ricky Rubio.