Hace unos días, NNGG del Partido Popular de Extremadura hacía un llamamiento a la Dirección General de Juventud, solicitando de forma urgente la puesta en marcha de una campaña de choque contra el consumo, actualmente disparado, de cocaína, pastillas de éxtasis, speed y otras sustancias estupefacientes. Los datos que acaban de publicarse por el Observatorio Nacional sobre Drogas (OED) no pueden ser peores. Este órgano ha dado la voz de alarma y la sociedad no debe dar una vez más la espalda. Cada vez se consume más drogas en nuestras calles y cada vez son más jóvenes los que se inician en este insalubre y peligroso hábito. La amplia oferta y cantidad de drogas ha generado que los precios sean a día de hoy más bajos y por tanto más accesibles al presupuesto semanal de los jóvenes. Más de 300.000 jóvenes españoles probaron la cocaína a lo largo del mes pasado, de ellos, 40.000 son ya consumidores habituales. La Agencia sobre Drogas de la UE (OEDT) calcula que aproximadamente 9 millones de europeos jóvenes de entre 15 y34 años han consumido cocaína en alguna ocasión, ¡9 millones!

XDURANTE ELx pasado mundial de fútbol, España no consiguió quedar en una buena posición pero sin embargo sí hemos conseguido ser los segundos de Europa en consumo de cocaína, tras Reino Unido. ¡Vaya hazaña! Yo me pregunto por qué preocupaba tanto la mala actuación y la mala posición que arrancó España en el Mundial y por qué preocupa tan poco los datos y rankings publicados por el Observatorio Nacional sobre Drogas.

Basta ver los telediarios para darse cuenta de que el tiempo dedicado a tratar cada una de las anteriores noticias no tiene nada que ver. Se dispara la venta y se dispara el consumo de veneno en forma de polvos y pastillas en nuestras ciudades y malo no es eso, lo malo es que mientras ocurre, hay quien mira para otro lado aplicando el "ojos que no ven, corazón que no sienten".

Tuve la oportunidad de observar hace una semana el nuevo rostro de Whitney Houston en una revista. Aparecía demacrada, enfermiza, lívida y con la mirada perdida. El crack y la cocaína la habían llevado a la más absoluta indigencia. El rostro de Whitney es el rostro de miles de jóvenes extremeños y españoles, y o ponemos remedios, o esto va a más.

Hay centros, ONG y asociaciones trabajando contra esta situación, fomentando la prevención y la concienciación, pero lamentablemente los recursos con los que cuentan son muy limitados. Necesitan ayuda; ayudas de las familias dando mayor diálogo y comunicación a sus hijos; ayudas de los partidos políticos elaborando campañas y programas de prevención e inserción social; ayudas de los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado incrementando las redadas y las actuaciones contra los narcos y contra los distribuidores. Me pregunto cómo es posible que en nuestras calles y barrios todo el mundo sepa quienes son los camellos y la policía no haga nada contra ellos. Se necesita ayuda elaborando leyes más contundentes que permitan mantener entre rejas a quien trafique con drogas. La lucha contra la droga es y debe ser responsabilidad de todos, así que ofrezcámosle la importancia que tiene porque la droga mata, la droga produce marginación y la droga destroza familias. Ya saben, o prevenimos y luchamos o lamentamos; está en nuestras manos.

*Presidente Regional de NNGG de

Extremadura