WEwl Parlamento vasco fue ayer incapaz de elegir a un nuevo presidente, al producirse un empate a 33 votos entre Juan María Atutxa, candidato del PNV apoyado por EA, IU y Aralar, y Miguel Buen, socialista, que contó con los votos del PP. La situación puede derivar en un estancamiento indefinido. El reglamento no prevé qué hacer ante esta situación inédita, PNV y PSE anuncian que mantendrán a sus candidatos y el Partido Comunista de las Tierras Vascas (EHAK) asegura que seguirá absteniéndose mientras el candidato del PNV sea Atutxa.
El bloqueo político de Euskadi debe romperse. Mal se podrá avanzar en la pacificación del País Vasco si los partidos no son capaces de recuperar unos mínimos cauces de diálogo y la normalidad en el funcionamiento de las instituciones democráticas. Mientras EHAK disfruta de la posibilidad de inclinar la balanza y el PP sepulta en Madrid el pacto antiterrorista, y deja claro que intentará minar cualquier posibilidad de diálogo para acabar con ETA, el PNV y los socialistas vascos no pueden enzarzarse en una disputa menor. Los partidos que deberán llevar el peso de cualquier iniciativa mínimamente viable para avanzar en la pacificación de Euskadi deben empezar a colaborar ya.
