El hospital San Pedro de Alcántara quiere ser hospital universitario, es decir, centro de formación de estudiantes de Medicina. Dos de sus médicos más relevantes, los doctores Fernando Masa e Ignacio Casado, han hecho la defensa del centro y han pedido a las autoridades que les dé ese rango.
Lo que solicitan los dos facultativos es un asunto importante, y por ello es exigible rigor. A todas las partes. Es decir, al centro sanitario para que cumpla los requisitos de calidad que lo haga universitario, y a los responsables políticos para que, si los cumple, se le otorgue.
Todo el mundo es consciente de que las facultades de Medicina deberían ampliar su oferta para cubrir racionalmente las necesidades de médicos. La Facultad de Medicina de la Uex ha ido paulatinamente aumentado sus plazas, y aspira a albergar a 140 alumnos por curso. Pero aumentar las plazas en Medicina es complicado, porque es una carrera que requiere una formación muy exigente, cuya piedra angular son las prácticas. El Infanta Cristina tiene dificultades para ofertar prácticas de calidad para un cada vez mayor número de alumnos. Esa circunstancia no debería estrangular el crecimiento de la facultad si existe la posibilidad de que el San Pedro cumpla los requisitos para acoger estudiantes. Ampliar la posibilidad de prácticas es ampliar las posibilidades de la facultad.
