Escritor
Los partidos últimos del Real Madrid están dando lugar a la aparición de todo tipo de supersticiosos, y por supuesto de supersticiones. Como se sabe, familias enteras se reúnen a ver los partidos de este equipo, con todo lujo de viandas a la espera del gol de Raúl o de Ronaldo. En la casa de mi amigo, la cosa empieza con la voz cantante de éste:
--Vamos a sentarnos todos como en el partido de Liverpool... No, tú aquí, que después se despista Hierro.
Y comienza el partido. En ese momento el anfitrión recuerda que le dio varias veces al mechero como queriendo infundirle luz a Guti, que lo ha dejado su esposa:
--Joder, mira que dejar a Guti ahora. En el primer partido con la Juventus, Guti era amado profundamente por Arancha... Oye vamos a juntar los anillos de casados como hacen Hierro y Raúl...
La verdad que es emotivo este detalle de juntar los anillos de casados:
--¡Gol! ¡Gol!...
--Me cago en la leche. Vamos a mudarnos todos de sitio, que estamos mal puestos y Urano se cruza esta noche con Plutón... Venga, todos... Tú no enciendas ahora el cigarrillo... Me voy a poner de pie, que contra el Bar§a me puse de pie y metió un gol Roberto Carlos... No bebas ahora, Margarita, que trae mala suerte...
--¡Gol! Segundo gol... Me voy a suicidar... Pero qué has hecho, Mari Loli... Vaya, ya están los vecinos cachondeándose de nosotros... Por favor, no traer todavía la tortilla de patatas hasta que no marque el Madrid.
--Es que se va a enfriar.
--Pues que se enfríe, coño.
--¡Gol! Otro gol y van tres...
--Hay que sacar la foto de Franco y la de Santiago Bernabéu... Sin ellos no somos nadie...
--¡Gol!
--¡Ves?, de Zidane...
Llevamos tres en contra. No os mováis. No enciendas ahora, que va a tirar Figo el penalti.
--El año que viene, cada partido lo presidirán Franco y José Antonio. Del Cristo como de la Guardia Civil, no me fío, según dice Pérez de Acevedo.
