¿Y NO SE CONGELAN?

Durante las navidades y el jueves mismo he pasado por la plaza Mayor de Cáceres y he visto que los grupos de jóvenes haciendo botellón continúan allí, bebiendo bajo un frío increíble. Sin entrar ya en el perjuicio que supone para su organismo el consumo de alcohol, me pregunté si eso realmente era digno de personas: estar a pocos grados, totalmente muertos de frío, bebiendo en vasos de plástico, apiñados como indigentes. Tantos años llenándosenos la boca con la palabra progreso y diciendo lo moderna que es nuestra juventud para acabar así. No digo que los que están dentro de los bares sean mejores, pero resulta una indignidad ver a esos jovencitos de apenas 15 años agarrados a la botella haga el tiempo que haga. A mí me dio vergüenza y así lo digo, aunque también habría que decirles algo a sus padres, que supongo que estarían bien tranquilos en casa, pensando que sus hijos no están haciendo nada malo.JOAQUINA SANCHEZ. Cáceres