LA LEY DE CONVIVENCIA Y ELTRASLADO DEL ´BOTELLON´

Como joven que soy, llamo porque me ha sorprendido mucho la denominada Ley de Convivencia y Ocio de la Junta, y me sorprende por varias cosas. Primero, no me explico cómo una ley autonómica tiene que ser aplicada por los ayuntamientos y que sea con el dinero de mis impuestos, que evidentemente prefiero se gasten en medidas sociales, con el que se tenga que costear el traslado, pero el traslado de qué me pregunto. Dicen que del botellón , pero cómo se puede trasladar un botellón como si hablásemos de muebles u otras cosas, cuando hablamos de jóvenes, a los que ahora parece ser les vamos a dar más facilidades aún para que se emborrachen, porque como no molestarán a nadie tendrán más tiempo para beber. Segundo, que me sorprende cómo se puede llamarse a una ley así de convivencia y ocio. ¿Desde cuándo es ocio la ingesta de alcohol como justificación, peregrina por otra parte, para relacionarse o salir con los amigos? No soy Aramís Fuster, pero sepan que el botellón , al menos el de la plaza de Cáceres, no desaparecerá, quizá podrán reducirlo o erradicarlo unas semanas, pero no nunca. Se los dice alguien que está en la calle. ANTONIO SERRANO. Cáceres