Estas líneas van dirigidas a los políticos en general. Tanto a nivel nacional como regional su comportamiento deja bastante que desear. Para no ser menos, aquí en nuestro ayuntamiento también hay lo suyo. Hace unos días y ante las cámaras de televisión pudimos ver com el presidente del Senado, Javier Rojo ante la actuación de los allí asistentes tuvo que llamarlos al orden con energía. Sus palabras textuales fueron "que era una vergüenza y no podían dar esa imagen".

La culpa es de todos, tanto de unos como de otros. No se dan cuenta que con esto pierden categoría y credibilidad ante los ciudadanos que si en su día les votamos fue para que procuren buscar el bien general de todos los españoles. Me parece bien que cada cual defienda sus ideas, pero siempre dentro de las normas cívicas sin llegar a la crispación o enfrentamiento personal, como ocurre. Señores míos: no se porten como niños enfadones y demuestren su madurez. Olviden sus rencillas y mirándose a la cara se den la mano como caballeros que debieran ser con sinceridad y buenas intenciones dando ejemplo a los demás. Tienen que hacerlo. Porque lo cierto es que no se consigue aquello que no se intenta.

Bonifacio Hernández Tejeda **

Plasencia