De timo en timo

Durante un brevísimo espacio de tiempo he sufrido dos consumados y un intento de sablazo... estafa, chantaje, timo, llámenlo como quieran. No sé si será por culpa de la crisis o simplemente porque los españoles siempre hemos sido un poco pícaros, pero lo cierto es que las empresas están agudizando su truhanería de tal manera que rozan lo punible, ya que su único fin es el sacarnos la mayor cantidad de euros en el menor tiempo posible. Explico mi caso con todo tipo de detalles. Primero, me manda Endesa el recibo del pago de la luz con mis datos erróneos. Para solucionar su error , me obligan a llamar en tres ocasiones a un 902, manteniéndome con música de ambiente durante más de cinco minutos en una de las llamadas. Ellos se justifican diciéndome que no se les permite llamar a sus clientes. Segundo, sin haberme recuperado del primer sobresalto, llevo mi coche al taller de la esquina porque no me funciona el aire caliente. Tras dos horas de reparación, y según ellos, tras desmontarme el vehículo, me informan que lo único que le pasaba era que no tenía líquido refrigerante: cincuenta euros de multa . Y por último ahí va el intento, el CD Badajoz quiere cobrar a sus abonados, entre los que yo me encuentro, quince euros extra por ver el partido contra el Extremadura. Teniendo en cuenta que en la primera vuelta yo fui a Almendralejo para ver ese mismo partido y tan sólo tuve que pagar, sin ser abonado y jugándose más de lo que se juegan ahora, doce euros, me parece una verdadera vergüenza que nos intenten desvalijar eso ahora. ¿Cuánto nos va a cobrar en los partidos de ascenso a la segunda B?