EN MEMORIA
A Javier Canchal
Máximo Rubio Nevado
Querido amigo y compañero, ayer justo hace un año que partiste. Qué día más desgarrador y triste fue para todos. Quiero que sepas que por aquí te seguimos recordando con un sentimiento de mucha pena y tristeza, aunque a la vez sentimos un gran consuelo en nuestros corazones porque sabemos que estas descansando en paz y que desde allá arriba estarás cuidando de cada uno de nosotros. Todos tus seres queridos y amigos te extrañamos demasiado y le damos gracias a Dios por haberte conocido y ahora que estás allá, en el cielo, queremos decirte que jamás dejaremos de amarte y recordarte porque fuiste un ser muy especial para todos y, aunque tu cuerpo ya no está entre nosotros, tu alma sí. Sé que tu misión en este mundo terminó justo hace un año, pero tu legado está presente entre todos nosotros y te estamos agradecidos por cómo fuiste y, aunque en este día nos invada aún más ese sentimiento tan profundo de tristeza, hoy quiero decirte que los amigos no mueren cuando faltan, sino cuando dejan de recordarse. D.E.P. Te queremos.
MANIFESTACIONES
Mordaza ya inútil
Carlos Giraldo Llanes
Zaragoza
Las manifestaciones valen de poco si no las reseñan los medios de comunicación. En su sección de 'Manifestaciones y protestas', TVE recoge 45, todas en el extranjero, excepto una, (el dos por ciento) referente a los de armadores gallegos, y dos (el cuatro por ciento) sobre incidentes o juicio a manifestantes.
LA CINEMATOGRAFIA
De cine
María Francisca Ruano
Cáceres
Las tardes y las noches tienen mucho de cinematográficas. Porque lo tuvieron. Porque lo mantuvieron. Porque nos sostienen a veces en la correspondiente realidad todavía, porque hay cines aún y hay cinematografía.
La historia de este arte surgió hace 1870 y en 1895 se realizó la primera proyección pública pagada en París y se llamó también industrial. Hay tardes y hay noches cinematográficas en cada vida más o menos acompañada. Las salas oscuras de luces encendidas por las emociones ya son momentos de cine. Lo que siente o aprende o escucha un espectador a lo largo de cualquier azarosa existencia queda a menudo grabado por un sentimiento íntimo que, sobre su butaca, no le abandonará así como así. Son películas nada más, de acuerdo, cinta perforada de acetilcelulosa con bromuro de plata, pero un buen director, los actores, un guión con diálogos y música trabajados con inteligencia, transforman el pequeño mundo de quien está sentado allí. Lo hace más grande y ensanchan las costuras con las que se viste cualquiera. Para subsistir, suspirar, soñar.
