Lamentable espectáculo, y no precisamente futbolístico, se ofreció ayer en el encuentro que enfrentó al Montijo y Don Benito. En este caso no hubo trifulca entre contrarios, sino del jugador dombenitense Ricardo con su propio entrenador, Emilio González, quien cambió al primero once minutos después de haber entrado en el césped, lo que se entendió por algunos como una provocación del técnico. Lo cierto es que ambos tuvieron que ser separados por el resto de la plantilla para que el refriega no fuera a más. Lamentable episodio de violencia por parte de quienes tienen la responsabilidad, de cara al público, de dar la buena imagen del deporte.

Pero no todo son trifulcas en las plantillas. De hecho la mayoría de los trabajadores extremeños se sienten satisfechos con sus empleos, según datos del Ministerio de Trabajo, que ha hecho público una encuesta en la que señala, a su vez, que los funcionarios padecen más estrés que los trabajadores del sector privado. Por contra los empleados echan de menos mayor participación en las decisiones de sus empresas. El trabajador extremeño ve interesante su profesión y se siente orgulloso de lo que hace. Lo dice el estudio del ministerio.