WEwl aula de la UNED en Cáceres pasa por momentos de incertidumbre. Después de dos meses funcionando, como extensión del de Plasencia, y ya con 300 alumnos, aún no cuenta con el correspondiente convenio que le otorgue carta de naturaleza y seguridad jurídica. Son loables los esfuerzos que ha hecho el Ayuntamiento de Cáceres para contar con el centro de la UNED, pero este reconocimiento no es incompatible con la exigencia, como pertinentemente hace el grupo municipal socialista, de que es necesario acometer, y con urgencia, la regularización administrativa del aula. No es posible que a estas alturas del curso haya discrepancias sobre los términos que debe recoger el convenio. Aquí hay un desencuentro que, cuanto antes, hay que resolver, siendo responsabilidad del Ayuntamiento y de la UNED hacerlo sin que peligre el aula ya en marcha. Sería inconcebible que se truncara la continuidad de la UNED en Cáceres, que representa una gran oportunidad para muchos vecinos que no pueden cursar sus estudios universitarios de otro modo. Pero la falta del preceptivo convenio está teniendo consecuencias tan indeseables como que no se puede utilizar la ayuda que la Caja de Extremadura otorgó para el centro, o como que los profesores llevan dos meses sin cobrar.