TYt parece que va en serio esto de la gripe porque la medida de vacunar a los docentes habla más que calla. No creo que la preocupación de nuestros Ministerios, Sanidad y Educación, sea proteger la salud de los docentes, más bien la medida preventiva se explique mejor por la muy previsible avalancha de bajas médicas que por procesos gripales o temores gripales se producirán a partir no de septiembre, seguramente octubre y noviembre.

En este país de horarios laborales irracionales y conciliaciones irreconciliables por fin nos tratan como merecemos, un pilar básico de nuestra sociedad, tan básico que los resultados en PISA no son importantes, el desarrollo de la función docente y el poder desarrollar el magisterio en un clima adecuado de estudio y respeto mutuo tampoco, la dignificación docente, la superación, el esfuerzo-, nada de nada, un país no puede permitirse el lujo de prescindir de aquellos que mantienen a nuestros púberes durante gran parte del día acuartelados . La medida además está bien pensada, una vez vacunados de la gripe ningún trabajador puede ponerla como excusa para no asistir a clases donde se haya descubierto algún caso y que seguramente sea la raíz de la repentina importancia social con las que nuestros gobernantes nos agasajan.

Con esto no me quejo de la medida que por cierto no sólo me parece adecuada sino necesaria, lo que sí extraña es por qué no a los docentes y a los alumnos de medias, tan necesarios para la Educación son los unos como los otros. Alguno puede comparar la situación con el personal sanitario, se vacuna a los médicos pero no se puede vacunar a todos los pacientes, exacto, pero en ese razonamiento falta una pequeña cuestión, la ley no obliga a los pacientes a permanecer durante horas en un recinto cerrado y con riesgo de contacto. Esta relevancia de nuestro papel en la sociedad agrada pero la tacañería en las vacunas asusta.

También es cierto que esto de la gripe puede ser significativo y hasta beneficioso en algunos casos, ninguna voz por ejemplo se ha alzado para vacunar a nuestros políticos (será que no son tan necesarios) de hecho alguno va más que gripado preguntándose qué es un ser humano o lo que es peor, creyéndose con la potestad de decidir quién lo es, cuántos llamarán a las 9:00 de la mañana a sus trabajos con un "Ahora voy para allá, es que creo que he cogido algo" para que automáticamente le concedan un permiso extra de cuarenta días. Incluso alguno tal y como está la cosa prefiera trabajar con gripe A que no hacerlo aunque esté tan sano como unas castañuelas.

Lástima que para otras pandemias y algún virus o alguna bacteria de nuestro país no encontremos vacunas.

Ahora mismito voy a ponerme una rebequita, por si las moscas.