WQw ué paisaje político deja la renuncia de Rodríguez Ibarra a ser candidato a la Junta en las elecciones de mayo del 2007? Esta es la pregunta política más sugerente que se puede formular hoy en la región. A ella trata de responder EL PERIODICO EXTREMADURA con la encuesta que aparece en estas páginas, contestando, a su vez, a otras cuestiones que se derivan de la anterior: qué grado de conocimiento tienen los extremeños de los candidatos de los dos grandes partidos; qué valoración; qué candidato creen los ciudadanos que se alzará con la victoria; ha afectado a las expectativas del PSOE la decisión de Ibarra de retirarse...

Los datos de la muestra dejan mensajes muy importantes para hacer frente a los próximos meses de precampaña. El primero de ellos es que el socialista Guillermo Fernández Vara empieza esta contienda ganándole el primer asalto al popular Carlos Floriano. En primer lugar, porque su partido gana las elecciones y cuenta, en estos momentos, con un voto decidido de más de 6 puntos por encima del que tiene el PP. Pero también porque, aunque el grado de conocimiento del primero es menor que el del segundo, no lo es mucho --a ambos no los conoce ni la mitad del electorado-- y, sin embargo, la valoración de cada candidato entre los electores que los conocen es dispar: Fernández Vara alcanza una ´nota´ de 6,59 puntos, Floriano se queda en 5,24 puntos. Fernández Vara es, de entre todos los políticos sobre los que se pidió valoración a los encuestados (los candidatos a la Junta y a las 4 ciudades más grandes de los dos partidos mayoritarios), el mejor valorado, mientras que Floriano es de los peor valorados. Vara tiene mejor valoración que la que recibió Ibarra (6,40 puntos) en la campaña electoral del 2003.

De la muestra también se deduce que el candidato socialista tiene el viento a favor: el índice de satisfacción global de los extremeños es alto, un 6 sobre 10; que sólo un 15% de los encuestados cree que las cosas han empeorado en la última legislatura y que la Sanidad es una de las gestiones más valorados. Sin embargo, la encuesta no resulta del todo favorable a Fernández Vara: el PSOE gana, pero su mayoría absoluta está en el alero; y ha bajado también, aunque sigan altos, el porcentaje de personas satisfechas con la gestión del Gobierno autonómico: la última muestra pre-electoral que se hizo en mayo del 2003, señalaba que el porcentaje de personas que creía que la región había mejorado era del 60%; ahora es del 34%.

Por otro lado, los encuestados dan vencedor al PP en la provincia de Cáceres: pasaría de 13 a 15 escaños en el peor de los casos, mientras el PSOE pasaría de 16 a 14 en el mejor. En esta provincia, la valoración de la Junta cae, así como el conocimiento del candidato socialista, con respecto a la de Badajoz; en sentido inverso, si la referencia es Floriano.

Más ciudadanos creen y desean que Fernández Vara gane las elecciones a Floriano que viceversa, pero es tanta la incertidumbre existente en estos momentos en el electorado que, con independencia del voto decidido, las dos terceras partes de los votantes no saben quién será el próximo presidente, y la mitad no sabe quién le gustaría que fuese porque también los electores están divididos por la mitad sobre si le gustaría o no que cambiara el partido en el poder. La conclusión es que los extremeños están expectantes y pendientes de qué les ofrece cada candidato. Hay mucho combate por delante.