TLta industria de la moto ahora se lamenta de que el Ministerio del Interior quiere prohibir a los menores de 14 a 16 años el uso de motocicletas. Lo que deberían aprender las empresas que hacen un gran negocio vendiendo velocidad es proponer acciones preventivas para implicarse en la reducción de accidentes y en el fomento de una cultura antivelocidad.

Por su parte, el ministerio tiene los instrumentos para desarrollar un plan conjunto en el que todos los sectores que se benefician de la velocidad se impliquen activamente en nuevas medidas para reducir tanto las víctimas jóvenes como mayores, que son también una verdadera epidemia (5.000 al año). Se trata de cambiar entre todos la cultura histérica de la velocidad por la de la responsabilidad.

*Catedrático de Derecho