Estamos dirigidos por unos gobernantes incompetentes, que tardaron mucho tiempo en explicar al pueblo español lo que estaba pasando. Supongo que pensaban en la pérdida de votos si decían la verdad, una verdad que llevaba al camino de la pobreza a miles de españoles. Y no tomaron a tiempo medidas que, aunque impopulares, habrían aliviado algo la situación y habrían empezado a sacar al carro del atolladero. Me maravillo de cómo Alemania ha sabido afrontar desde el primer momento este problema y cómo ha sabido aplicar los remedios para subsanar esta precariedad. Bravo por la señora Merkel.

Aquí solo parece importar la guerra de los partidos, a ver quién la dice más gorda y quién saca más trapos sucios del otro, y se dirime en los tribunales lo que se debería dilucidar en el Parlamento. Nuestros dirigentes han de ser valientes, tomar decisiones, explicar lisa y llanamente lo que está pasando y aportar soluciones, aunque sean duras (y que no solo las tengan que afrontar siempre los mismos, los más necesitados). Para dirigir un país hay que rodearse de gente competente, sin importar su ideología. Ha de contratarse a un equipo de sabios que nos lleven por la senda del bienestar. Ya está bien de echar la culpa a la burbuja inmobiliaria. En fin, creo que mis palabras son como regar en el desierto, pero si no somos conscientes de que hay que trabajar más y mejor, cada día seremos más pobres.

Señores Zapatero y Rajoy: dejen de tirarse piedras y tomen el ejemplo de Merkel. Me remito a la estadística de que Alemania ya ha salido de la recesión. Mientras, España continúa en el grupo de cola, con Grecia, Portugal e Irlanda. Que venga la señora Merkel para arreglar lo que nuestros políticos son incapaces de arreglar.

J. Antonio Casanovas Tomás **

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