Las opciones existentes hasta la fecha para un oyente con audífono que asiste a una conferencia son dos, aumentar la ganancia o, si la sala cuenta con lazo magnético, habilitar el modo T de su aparato.

Ambas alternativas plantean problemas, según explica José Manuel Abolafio, ya que "aumentar la ganancia aumenta el ruido general" y "no todas las salas cuentan con lazo magnético ni todos los audífonos con modo T".

Frente a la inversión "de 12.000 euros" que puede conllevar la instalación de un lazo magnético, "un sistema que convierte en señal magnética el audio, que luego el audífono descodifica", Abolafio ha recibido un accésit en el último concurso del Centro de Recuperación de Minusválidos Físicos de Albacete, "referencia nacional".

Su propuesta, que cuesta "entre doce y quince euros", parte del uso de "un emisor FM de coche, de los que se enchufan en el mechero".

Adaptándole "una fuente de alimentación de ordenador como transformador" y "pasando el audio que recoge el micrófono, digitalizado, al emisor", el inventor afirma que "es tan sencillo como avisar a los oyentes de qué frecuencia vamos a utilizar". Además, ha expuesto en su canal de YouTube los pasos para construir uno casero, con el nombre Adaptación Lazo de Inducción .

José Manuel Abolafio ya presentó el año pasado una propuesta de control mediante el ordenador del paso de corriente por los enchufes de una casa, "de forma que se pueda decidir con la vista, la voz o movimientos del cuello" a qué enchufes les llega corriente.

El inventor, que lleva trabajando trece años en Placeat, está actualmente inmerso en pulir su próximo aparato, dirigido a invidentes. "Suelen poner el dedo en el vaso que están llenando para saber hasta dónde hacerlo, pero eso es imposible con líquidos calientes", avanza. Su prototipo "costará 75 céntimos".