El alcalde no piensa ofrecer actividades alternativas ni pone plazo para que se produzca el traslado del botellón al ferial, que es el lugar elegido por su equipo de gobierno para ello en cumplimiento de la nueva Ley de Convivencia y Ocio, sino que dice confiar en convencer a los jóvenes mediante el diálogo que ha encargado a los policías in situ y al concejal de Juventud en reuniones con el Consejo de la Juventud, que ha solicitado autobuses nocturnos sin que ello cuente con el apoyo de Díaz.