El alcalde de Plasencia, Fernando Pizarro, iniciará mañana una nueva ronda de contactos con los propietarios de los terrenos expropiados en las huertas de La Isla para llegar a un acuerdo que evite el colapso de las arcas municipales.

Tanto el regidor como el concejal de Urbanismo, José Antonio Hernández, han apelado en los últimos días a la "conciencia de ciudad" de los acreedores, ya que la consecución o no de un acuerdo condiciona seriamente la viabilidad económica del ayuntamiento, cuyo índice de endeudamiento se eleva al 161,34 por ciento.

En julio de 2014, la sala de lo contencioso administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) dictó un auto en el que obligaba al ayuntamiento a abonar 5,5 millones de euros en tres años a los propietarios de las huertas, quienes a partir de la aprobación de la revisión del Plan General Municipal podrán aceptar o no el pago en suelo de la deuda restante, hasta un total de 40 millones.

El consistorio ya ha hecho efectivo los dos primeros pagos (1,5 millones en 2014 e idéntica cantidad en 2015) y tiene pendiente el pago de otros 3 millones en 2016, ya que el TSJEx elevó recientemente en 500.000 euros la cantidad que debe abonar el ayuntamiento el próximo año.

En este sentido, las cantidades referidas a las anualidades de 2014 y 2015 han sido imputadas directamente a amortizar capital (el principal asciende a 26,8 millones de euros), no así respecto a la del año 2016, que se imputará primero a pagar intereses.

De igual forma, el consistorio está obligado, una vez que entre en vigor el nuevo Plan General Municipal, a ofrecer suelo con aprovechamiento urbanístico a los propietarios, al objeto de que éstos valoren si aceptan un pago en especie del importe de la ejecución que quede por abonar.

En el caso de que se llegue al 1 de julio de 2016 sin que los propietarios de las huertas haya aceptado el pago en suelo, se llevará a cabo una comparecencia ante la sala como paso previo a la fijación del calendario de pagos del año 2017 al 2023.