El pasado mes de abril, la consejera de Educación, Esther Gutiérrez, visitaba Plasencia y anunciaba las novedades para el nuevo colegio de las huertas y la unificación del de San Miguel. Del primero, explicó que tendrá 6 unidades de Infantil, es decir, dos lineas por curso y 12 de Primaria, otras dos lineas por curso. Pero el gobierno municipal reivindicó ayer públicamente a través del alcalde que se amplíe a tres líneas por curso.

¿Por qué? Básicamente por una cuestión numérica. Porque el nuevo colegio vendrá a sustituir a dos, el Alfonso VIII y el Ramón y Cajal. En Infantil, el primero tiene dos lineas por curso y el segundo, una, en total, tres lineas. Si el nuevo colegio solo tiene dos, se perdería una, es decir, tendría cabida para 25 plazas menos.

Fernando Pizarro señaló ayer que el nuevo colegio ya supondrá una merma en cuanto a los cursos de Primaria porque algunos del Ramón y Cajal tienen dos líneas y no una como en Infantil.

Por eso, subrayó: «no quiero perder plazas ni tampoco de profesores porque es personal, son funcionarios y hay que defenderlo desde todas las perspectivas. La justificación existe».

El alcalde afirmó ayer que esta petición ya se la ha hecho en privado tanto a la consejera como al presidente de la Junta y considera que «ahora es el momento de hacer las reflexiones. Si yo tuviera ya el proyecto encima de la mesa, no diría esto».

Pero señala que los técnicos de la Consejería de Educación están aún con los trámites iniciales y, por tanto, es posible contemplar la ampliación de lo previsto inicialmente.

tendrá más demanda / Otros argumentos que esgrimió ayer Pizarro son que el nuevo centro tendrá posiblemente más demanda porque servirá para descongestionar los del norte y se refirió concretamente a los de la zona de Miralvalle y El Pilar, ahora con más demanda que oferta.

También apuntó que, igual que la consejería ha modificado el presupuesto inicial para el proyecto de San Miguel y lo ha elevado de 600.000 euros a 1,3 millones, puede hacer lo mismo con este proyecto, dotado en el Plan de Infraestructuras Educativas con 3,7 millones de euros.

«Entiendo que la Junta tiene que hacer sus análisis y la administración es poco dada a hacer macrocentros, pero al final, el objetivo es que cada uno pueda matricular a sus hijos allí donde quiera y este nuevo centro podría equilibrar la oferta educativa». Por todo, apeló a Gutiérrez: «esta reflexión la tiene que hacer la consejera».