Las cofradías no tendrán que temer que los pasos de Semana Santa se mojen en Santo Domingo. Sólo tres días después de que la Unión volviera a advertir sobre las goteras por donde entra agua al templo cada vez que llueve con intensidad, este problema ha comenzado a subsanarse.

Ayer, operarios de la empresa Arcoex, la misma que ha llevado a cabo los trabajos de conservación y limpieza interior, sellaron la parte exterior de las dos ventanas por las que se cuela el agua. Lo hicieron con una grúa de grandes dimensiones de la empresa Grúas Eugenio, que llamó la atención de los turistas.

Con el sellado exterior está garantizado que, en el caso de que lloviera lo que queda de Semana Santa, los pasos no se mojarían, según informaron ayer los operarios, pero esto no significa que haya acabado la obra porque para rematarla, deben sellar también las ventanas por el interior.

Sin embargo, dado que ahora el templo está ocupado por los pasos y que la mayoría de las procesiones salen de esta iglesia, será después de las fiestas cuando concluyan los trabajos.

El presidente de la unión de cofradías, Antonio Sánchez-Mora, se mostró ayer muy satisfecho por el arreglo de las goteras, ya que habían advertido a la Junta de su existencia antes de que comenzara la obra interior y, ante la falta de solución, informaron también al obispado y pidieron incluso a la alcaldesa que hiciera de mediadora ante la Junta para evitar el tener que recurrir a poner cubos en estos días.