Procasa es uno de los barrios más antiguos de la ciudad, con bloques de gran altura y vecinos en su mayoría mayores. Pero su imagen va a dar un giro de 180 grados gracias a un proyecto de los artistas placentinos Misterpiro y JMBrea, quienes, respaldados por la Concejalía de Juventud, van a transformar sus fachadas para crear un museo al aire libre, de arte urbano y contemporáneo.

La transformación comenzará hoy mismo y, en principio, la primera fase del proyecto culminará el día 20, salvo que las condiciones climatológicas obliguen a modificar alguna fecha, como explicó ayer el técnico de Juventud Luis Manuel Rodríguez.

Misterpiro y JMBrea estarán también acompañados por un artista invitado, el alicantino Antonyo Marest, y entre los tres, pintarán tres medianeras de bloques de Procasa, con medidas que, según dijeron, son «perfectas» para los artistas urbanos, de 5 metros de ancho por 18 de alto. Cada uno hará un diseño y en los tres primará el colorido. Además, se intercalarán en los trabajos, de manera que Brea pintará desde hoy y hasta el domingo, Marest, de sábado a martes y Misterpiro lo hará desde el lunes.

Invasion Street Art Festival es el nombre que han dado a este proyecto, que va más allá de una semana pintando fachadas y que «llevábamos tiempo con ganas de hacer», indicó Rodríguez. Este recordó que la Concejalía de Juventud lleva años apoyando el arte urbano, de hecho, en el 2000, el ayuntamiento cedió muros a los artistas para pintar y en el 2004 comenzó a funcionar la escuela de ocio de grafiti. Ahora, aportará de 4.000 a 5.000 euros.

Por eso, Brea dijo ayer que Invasion es «el punto y final» de este recorrido, pero también «el punto inicial de algo grande».

Porque lo han concebido como un festival para darle continuidad, de forma que cada año puedan acudir otros artistas a pintar fachadas, tanto del panorama nacional como internacional, e incluso se plantean poder realizar talleres con niños en el futuro, como señaló Misterpiro.

Así, además de sacar el arte urbano contemporáneo a la calle, lo conciben como un atractivo turístico y de promoción de la ciudad, además de como una invasión en el barrio para crear una galería urbana.

De momento, las comunidades de vecinos de dos bloques les han autorizado porque «pensamos que dará más alegría al barrio», según Manolo Alonso. Pepe González se mostró «halagado» y agradeció a la concejalía «que se hayan acordado de Procasa y nos embellezcan el barrio».