El fiscal ha pedido tres años y tres meses de prisión para el conductor de 29 años que el verano del 2005 atropelló a una mujer en el paso de cebra del ambulatorio causándole la muerte. J.P.M., dio 0,8 en la prueba de alcoholemia y Tomasa P.P., de 50 años, murió casi en el acto dejando a una niña de 13 años.

El juzgado de lo Penal ha señalado para el día 26 de octubre el juicio por un presunto delito de homicidio imprudente y si la pena es mayor de dos años, el acusado tendrá que ingresar en prisión. La fiscalía también ha pedido par él la retirada del carnet durante cinco años además de una indemnización para la adolescente, que ha quedado al cargo de una hermana de su madre.

Los hechos ocurrieron el 7 de agosto del 2005 cuando la mujer, vecina de Miralvalle, se dirigía al trabajo. Eran las nueve de la mañana de un domingo cuando se le cruzó en su camino un coche que la desplazó varios metros desde el paso de peatones. El suceso conmocionó a Plasencia y a Hervás, donde nació.

Fue el autor del atropello, que dio 0,8 cuando el máximo permitido es de 0,25, quien llamó al 112 desde su móvil para socorrer a la víctima, a cuyo velatorio acudió al hospital junto a su familia después de derrumbarse en las dependencias policiales al tomar conciencia de lo ocurrido. El joven permanece en libertad a la espera del juicio, al que han sido citados siete testigos, entre ellos dos policías locales y dos guardias civiles.