En algunas viviendas se habrán quedado sin agua y en otras con solo "un hilo" en el grifo. El ayuntamiento confirmó ayer que la rotura de la tubería de impulsión del agua desde la presa a los depósitos situados junto al hospital ha afectado a toda la ciudad y que la normalidad llegará en la medida en que éstos se vayan llenando de nuevo. "Las zonas altas y los pisos altos han sido los más afectados, pero sí ha sido generalizada la falta de abastecimiento", indicaron ayer fuentes municipales.

La avería, no obstante, se produjo dos días antes y si ha tardado en restablecerse el servicio es porque se reparó, pero volvió a averiarse, según las mismas fuentes. El origen está en la antigüedad de la conducción, que es de fibrocemento y se trata de un material ya en desuso que no basta con reparar, sino que urge renovar. Lo que estaba, de hecho, en previsión años atrás, pero nada se ha vuelto a saber.

QUEJAS Mientras tanto, vecinos de diversas zonas de la ciudad se han quejado de la falta de presión o directamente de la falta de agua en llamadas al ayuntamiento y al propio servicio del agua, donde les confirmaron la avería. Por lo que la protesta más común ha sido la de falta de previsión por parte del ayuntamiento. "No se entiende cómo el ayuntamiento no ha previsto antes una solución si se sabe que una tubería imprescindible para el abastecimiento de toda la ciudad está en estado tan precario". Así lo dijo uno de los afectados que adelantó además estar dispuesto a poner una reclamación al ayuntamiento. El Periódico trató sin éxito de contactar con la concejala de los Servicios Municipales, Carmen Blázquez. La situación se fue generalizando ayer a medida de que los depósitos se iban quedando vacíos.