El ayuntamiento tiene localizados actualmente un total de 42 vertidos ilegales de escombros y los va a retirar todos. Según ha explicado el concejal de Medio Ambiente, Luis Miguel Pérez Escanilla, la fórmula elegida para hacerlo es a través de un contrato menor con una empresa. Además, una vez retirados, utilizará el dron adquirido por el ayuntamiento para vigilar las zonas donde se producen generalmente, con el fin de que no se repitan o, en el caso de darse, poder identificar a sus autores.

Sobre la retirada de los vertidos, el edil ha señalado que se han pedido presupuestos a tres empresas y espera que esta misma semana ya pueda contar con ellos. «Se lo adjudicaremos al mejor postor y los retiraremos», dijo. Por lo tanto, espera que esto se produzca en un periodo de tiempo relativamente corto.

Por otro lado, hizo hincapié en que los denominados puntos calientes serán objeto de vigilancia y así se les ha comunicado a los agentes de la policía local con formación para pilotar el dron.

El concejal de Medio Ambiente ha recordado que, en virtud del protocolo de actuación en estos casos que se puso en marcha en el 2016, cada vez que se detecta un vertido, se geolocaliza y se abre un expediente. «El protocolo dice que, aunque no se identifique al autor, el ayuntamiento tiene la obligación de retirarlo y de anotar tanto la naturaleza del vertido, como el modus operandi... Por si en el futuro se puede vincular con un autor y se le identifica».

De momento, hay cinco expedientes que han finalizado con propuestas de sanción porque se ha conseguido identificar a los autores. El resto continúan, de momento, sin identificar. Según la ley de residuos, las multas más leves serían de 900 euros y las más graves ascenderían hasta 1.750.000.

Con todo, y pese a que siguen apareciendo vertidos y algunos se han retirado ya, Escanilla ha querido subrayar que «seguimos trabajando» y ha distinguido entre los vertidos pequeños, que son de competencia municipal, y los de volumen grande, que suele autorizar la Junta, pero que «no se pueden almacenar en una finca». Hay un caso en Plasencia y lo que se hace en esta situación es «informar a la Dirección General de Medio Ambiente de la Junta» porque esos materiales tendrían que llevarse a la planta de reciclaje de residuos.

A lo largo del 2017, se detectaron unos 80 vertidos ilegales. La mayoría son de escombros, madera, muebles, enseres y electrodomésticos.