El ayuntamiento ha decidido ya qué tipo de peatonalización quiere para el centro. Después de estudiar dos proyectos, distintos sistemas de control de los pivotes magnéticos y escuchar las opiniones de vecinos, empresarios y taxistas, ha optado por instalar cuatro nuevos pivotes en la puerta de Coria, San Esteban y la calles Santa Ana y Toro.

Esto significará el cierre total de la plaza y también de céntricas zonas como el acceso a San Nicolás y el parador, la plaza de abastos y la plaza del Salvador. La alcaldesa ya advirtió de que su intención era instalar el máximo número de pivotes posible y así se decidió ayer en una reunión que mantuvo con la edil de Turismo, Raquel Puertas, y técnicos municipales.

Puertas aclaró que su instalación no implica que todos se vayan a utilizar, sino que después habrá que ir viendo su funcionalidad. Lo que también se decidió fue el sistema de control, que se hará a través de fibra óptica y no de telefonía móvil porque en este caso el mantenimiento resultaría más caro. Con la fibra, será necesario levantar 62 metros de suelo para enterrar los cables y habrá cámaras en todos los puntos donde haya pivotes.

Por otro lado y, en respuesta a la petición de los comerciantes de agilizar el párking de la puerta del Sol antes de peatonalizar, la edil anunció su intención de mantener una reunión antes de Semana Santa con el responsable del aparcamiento de la puerta Talavera para pedirle que abarate los precios y así favorecer el aparcamiento que se eliminará con los pivotes. La previsión es que en una semana esté listo el pliego de condiciones y se abra el concurso para optar a la adjudicación del proyecto.