La unión de empresas que gestiona el servicio del agua en la ciudad tendrá que seguir prestándolo porque el ayuntamiento ha denegado su solicitud de rescisión del contrato. Así lo aprobó el pleno del lunes en base a un informe de los técnicos municipales que refuta los argumentos esgrimidos por la empresa.

El concejal de Hacienda, José Antonio Hernández, recordó ayer que el pliego de condiciones de la licitación del servicio era muy ambicioso, y más aún lo fue la oferta presentada por la UTE Aguas de Plasencia --la concesión se hizo en el 2007 por 15 años-- de hecho, incluía obras por valor de 17 millones de euros y aún faltan por ejecutar actuaciones valoradas en unos 9 millones, de las que algunas ya ha realizado la Junta, por lo que se tendrá que revisar en qué se invertirá el dinero.

Precisamente y según Hernández, la UTE esgrime para pedir la rescisión del contrato la dificultad para ejecutar las obras, pero el informe técnico señala que eso forma parte del "riesgo y ventura" que asume una empresa cuando se presenta a una licitación con una oferta.

Por tanto, señaló que, si quiere rescindir el contrato, tendrá que acudir a los tribunales, como recordó que ya ha hecho para otras cuestiones y "siempre ha ganado el ayuntamiento". No obstante, explicó que, cuando el PP llegó al gobierno en el 2011, se encontraron con una situación difícil porque la UTE planteaba un ERE y reducción de sueldos, pero ahora están en un momento de "paz social". De hecho, la UTE trabajará ahora en la renovación de tuberías de Sor Valentina Mirón y ejecutará los cambios necesarios también en Martín Palomino.

Otro aspecto que ha pedido la UTE y que también le ha denegado el ayuntamiento es desprenderse de una de las empresas que la forman, porque se encuentra en concurso de acreedores.