La concejala de Patrimonio comenzó hace dos años a requerir a propietarios de viviendas de la zona centro que adecentaran sus fachadas "por ornato y decoro" con el fin de mejorar la imagen de los inmuebles del casco histórico y también por seguridad, dado que algunas viviendas tenían deficiencias. A día de hoy, el ayuntamiento ha realizado ya a instancias de la concejala Mónica García unos 80 requerimientos.
Sin embargo, García reconocía ayer que han encontrado dificultades para conseguir que esos arreglos de fachadas fueran una realidad porque "hay muchas viviendas deshabitadas y es complicado encontrar a los dueños". Además, en algunos casos se han tenido que repetir los requerimientos: "Hay que tener en cuenta que en el centro vive mucha gente mayor y hay que tener mucha mano izquierda", afirmaba. En último caso, lo haría el ayuntamiento con cargo a los propietarios.
No obstante, la concejala decía ayer no estar descontenta con el resultado porque "se va pintando, la gente lo va haciendo" y ponía de ejemplo viviendas de la calle Podadores, el postigo del Salvador o el resbaladero de las Capuchinas.
Aún así, es consciente de que hay que seguir insistiendo y anunciaba su intención de pedir arreglos en otras fachadas de la plaza Mayor de cara también al turismo y dada la intención de la ciudad de ser Patrimonio de la Humanidad.
