Es el primer proyecto de cooperación directa en el Tercer Mundo del ayuntamiento, que contribuirá con 20.000 euros en dos años a mejorar los servicios sanitarios de las mujeres y los niños de las zonas marginales de Manila.

Forma parte de un ambicioso plan sufragado por la Unión Europea en 306.000 euros y cofinanciado también por la provincia italiana de Pisa y la comarca de la Toscana, la propia ciudad de Manila y dos ONG de Italia y Filipinas. La función de Plasencia será la de formar a personal sanitario con ayuda de la Escuela Universitaria de Enfermería y los técnicos de Servicios Sociales. Así, tres enfermeros o médicos filipinos se trasladarán a Plasencia por un periodo aproximado de tres meses para adquirir conocimientos y formar después, a su vez, a agentes de salud en Manila.

PANORAMA DESOLADOR

Será previsiblemente entre mayo y octubre, según indicaron ayer la edil de Bienestar Social, Raquel Puertas, y el responsable de la Agencia Local de Desarrollo, José Luis Muñoz, que ha gestionado la incorporación a este programa de cooperación internacional.

Los destinatarios de la ayuda de los placentinos serán los habitantes de zonas marginales localizadas en un barrio populoso de Manila donde el sistema sanitario es casi inexistente como la higiene siendo los más desfavorecidos los niños y las mujeres. En un panorama de alto índice de mortalidad infantil, incestos, prostitución a temprana edad y bajo nivel cultural en una sociedad de tabúes y creencias, el sistema sanitario es mayoritariamente privada y la capacitación profesional mínima.