Son otras huertas de La Isla , pero con diferencias. El ayuntamiento va a tener que pagar a cuatro propietarios la expropiación de siete inmuebles situados junto al puente Trujillo, entre ellos un establecimiento de hostelería. El ayuntamiento quiere esos terrenos para dejar la zona libre de edificios que impidan la visión de la muralla y además está obligado a expropiarlos por un requerimiento que realizaron los dueños en el año 1996.

Según explicó ayer el concejal de Urbanismo, José Antonio Hernández, el plan general de 1997 ya establecía que el suelo no era urbanizable y recogía la obligación de expropiar, pero "no se hizo". Por tanto, los propietarios recurrieron al tribunal del justiprecio, que fijó el valor de los terrenos en 876.000 euros. Esta cantidad no satisfizo ni al ayuntamiento, que considera que su valor es de 500.000 euros, ni a los dueños, que lo valoran en 1,5 millones. Ambos han recurrido ante el TSJEx.

Pero, según Hernández, existe un buen entendimiento con los propietarios y la intención es negociar el pago y llegar a un acuerdo antes de la sentencia judicial. "Ellos están abiertos a todo, a una quita, a un aplazamiento de los pagos y al pago en especie y en metálico --la idea es presupuestar ya alguna cantidad el próximo año-- y, a diferencia de las huertas, estos no han cobrado todavía un euro".