No existe un acceso directo en coche al barrio de los Mártires, aislado por la obra de la circunvalación sur, y muchos vecinos temen utilizar la pasarela peatonal por el riesgo de caídas. Así, para sus residentes, para las industrias allí ubicadas y para todo el que quiera ir al barrio en coche sin tener que realizar un largo recorrido, urge una rotonda. Los vecinos y el ayuntamiento ya se la han pedido a la Junta, propietaria actual de la variante sur, pero ayer, el gobierno local se comprometió por boca de su alcalde a agilizar la obra porque será el ayuntamiento quien redacte el proyecto.

El alcalde criticó que, en la legislatura anterior, ni el gobierno local ni el regional contemplaran un acceso directo al barrio y, en una reunión mantenida con la directiva vecinal y residentes, explicó que serán los técnicos municipales quienes realicen el proyecto de la obra, que dirá además el presupuesto necesario para acometerla. "Creemos que costará en torno a medio millón de euros, pero por las características del terreno y su cercanía al río podría ser más", señaló ayer en el barrio Fernando Pizarro.

El primer paso para realizar la rotonda lo ha dado el gobierno incluyéndola en el nuevo plan general municipal con el visto bueno de la Junta. Pizarro recordó que el plan también contempla un puente desde la propia rotonda hasta el otro lado del río, pero "la prioridad es la rotonda, el acceso directo a este pequeño polígono industrial y a las viviendas"

Además, está prevista una medida de seguridad añadida, un paso de peatones con semáforo porque hay mucha gente mayor en el barrio que se desplaza a pie a la ciudad. Según la previsión del alcalde, "en las próximas semanas estará listo el proyecto y sabremos lo que cuesta la obra y después buscaremos la financiación porque no sabemos aún si habrá cambios en la propiedad de las carreteras". En todo caso, Pizarro señaló que "si con fondos propios tenemos que ayudar, también lo haríamos".

La directiva vecinal del barrio, con unos 150 vecinos, salió ayer muy satisfecha de la reunión con los miembros del gobierno. "Lo primero es la rotonda", dijo su presidente, Cesáreo Pardo. Pero también han pedido más limpieza y papeleras, mejoras en iluminación y el cambio de ubicación del parque infantil, situado en una zona cuesta abajo al lado de la variante. "Queremos que este barrio no esté abandonado de la ciudad y que lo que digan lo hagan".