El gobierno municipal del PSOE ha intensificado los controles del horario de cierre y los ruidos en la movida nocturna. Tras las quejas hechas públicas por vecinos de la calle de los vinos y del céntrico Hostal Turnat, el ayuntamiento se ha comprometido a regular la situación y la policía local está realizando partes de los locales que incumplan, según fuentes municipales.

Entre tanto, Elia Blanco recibió en la alcaldía a los firmantes de las quejas y los vecinos consultados están a la espera de que surta efecto. Si bien fuentes policiales indican que "partes no hemos dejado de hacer, lo que no sabemos es si luego se tramitan o no". La alcaldesa puede llegar a decretar clausuras, tras los correspondientes avisos y tras probar que los locales cierran a deshora o no están debidamente insonorizados.

ORINES EN LA VIA PUBLICA Los denunciantes ya advirtieron de que no quieren cerrar a nadie el negocio, pero sí que el ayuntamiento haga cumplir la normativa a todos. Así en invierno los bares tienen que cerrar a las 1.30 horas y los bares especiales a las 2.30. Por Ley, sólo éstos pueden tener música además, como es obvio, de las discotecas y las salas de baile, que pueden permanecer abiertas hasta las cuatro de la mañana.

Unidas a las quejas vecinales por ruidos, se halla la de la basura y aunque en términos generales se limpia más y mejor las calles afectadas por la movida al día siguiente, el problema de los orines persiste. La ordenanza municipal de limpieza lo castiga, pero los residentes de algunas calles, como la de Melo o Chantre en San Pedro, aseguran que han tenido que retirar hasta defecaciones de sus puertas a cubazos de agua caliente.

Mientras los vecinos confían en que la regulación que promete el gobierno municipal sea efectiva. "Aunque sólo sea porque estamos casi en periodo de elecciones", apunta una vecina. Los afectados también van a controlar que el ayuntamiento cumpla con su compromiso.