Los bares que cuenten con terraza sí podrán sacar barras a la calle durante los días de la feria, siempre que ocupen la zona de mesas y sillas y no corten el paso a ninguna calle. Es la única excepción que hará el concejal de Festejos, Blas Raimundo, a su decisión de prohibir las barras en la calle en feria y así se lo comunicó ayer a una representación de hosteleros de la plaza Mayor, con los que mantuvo una reunión a petición del sector.

El concejal justificó esta medida por ganar en seguridad, sobre todo en calles estrechas como la de los Vinos --la más concurrida durante las fiestas, sobre todo a la hora de las cañas-- y porque las barras impiden la circulación de personas, explicó el edil. Sin embargo, puesto que los bares con terraza pagan una cantidad durante todo el año al ayuntamiento por ocupar suelo público, Raimundo ha optado por permitirles instalar barra, eso sí, siempre que estén en el espacio destinado a terraza y tampoco en este caso podrán impedir el tránsito de personas, según indicaron los hosteleros.

DECORADAS Y SIN CARPA El edil les ha pedido además que las barras no sean la típica mesa con un grifo de cerveza, sino que estén decoradas y también que controlen el volumen de la música, pero no podrán montar carpas "porque dice que son tercermundistas", indicaba ayer un hostelero.

El sector de la plaza Mayor se ha mostrado conforme con esta decisión "porque somos los beneficiados y ante todo se hace por seguridad", aunque alguno quiso echar una mano a otros hosteleros y señaló que "hay también sitios con calles anchas donde podían dejarles que las montaran". En cambio, el edil les ha advertido de que la policía local vigilará que instalan barras solo quienes lo tienen permitido y con las condiciones acordadas y al que no cumpla, le levantarán la barra y le impondrán una sanción. El concejal tiene previsto hablar mañana con la alcaldesa para que esta le dé el visto bueno definitivo.