La oposición alertó ayer de que el bulevar de Cañada Real sólo va a traer problemas al tráfico como ya ha traído a los peatones al haber tenido que estrechar los acerados. La exsocialista Pepa Camisón llegó a bautizarlo como "el bulevar de los sueños rotos" y criticó el empecinamiento del gobierno del PSOE por empezar por éste y no por los proyectados para las avenidas Virgen del Puerto, del Valle o Dolores Ibarruri visto el cuello de botella que se formará a la altura del asilo ante la negativa de las monjas a vender.

IMPUESTOS Y PISOS Pero también parafraseó a otro socialista, el exalcalde Cándido Cabrera para criticar que "se han cargado un pequeño parque entrañable por cemento y hormigón" y alertó de que los amigos de lo ajeno puedan trepar por las farolas que ha habido que acercar a los edificios al achicar las aceras.

Por su parte, el portavoz del CCPL, Félix Macías, criticó ayer la tranquilidad del gobierno, que un mes después de dejar las ordenanzas fiscales sobre la mesa en el pleno a petición de la oposición no ha reunido una sola vez a la comisión de Hacienda y censuró también que han optado por subirlas todas el IPC por "comodidad y no tener que trabajar sacrificando a las personas con recursos más bajos".

También preguntó dónde están los prometidos pisos de 60.000 euros mientras el portavoz del PP, Fernando Pizarro, pidió subvenciones a los jóvenes para la compra o alquiler de viviendas por importe de 3.000 o 3.600 euros al año en el primer caso y 120 al mes el segundo.